Para construir una nave industrial, es fundamental que el suelo reúna ciertas características para garantizar la seguridad, estabilidad y eficiencia de la estructura. Estas son algunas de las principales:

1. Capacidad portante adecuada:

  • El suelo debe ser capaz de soportar las cargas de la nave, incluyendo las de los equipos, maquinaria, vehículos y la propia estructura. Esto se evalúa mediante estudios geotécnicos que determinan la resistencia y la capacidad de carga del terreno.
  • Si el suelo no tiene suficiente capacidad portante, puede ser necesario realizar trabajos de mejora del terreno (compactación, rellenos, cimentación especial).

2. Estabilidad:

  • El terreno debe ser estable y no propenso a asentamientos diferenciales, deslizamientos o desplazamientos. Suelos como las arcillas expansivas pueden causar problemas debido a los cambios de volumen con la humedad.

3. Drenaje y nivel freático:

  • El drenaje es fundamental para evitar la acumulación de agua que podría afectar la estabilidad de la nave. El nivel freático (profundidad a la que se encuentra el agua subterránea) debe estar lo suficientemente bajo para no interferir con las cimentaciones.
  • En caso de niveles freáticos altos, pueden ser necesarios sistemas de drenaje o cimentaciones especiales.

4. Compactación:

  • Un suelo bien compactado es esencial para proporcionar una base sólida. En suelos sueltos o mal compactados, pueden aparecer asentamientos diferenciales, lo que podría provocar grietas o incluso el colapso de la estructura.

5. Topografía:

  • La pendiente del terreno debe ser la adecuada para facilitar el drenaje natural del agua y evitar la acumulación de agua en la nave.
  • Terrenos muy inclinados o irregulares pueden requerir movimientos de tierra significativos, aumentando los costos de preparación.

6. Ausencia de materiales expansivos o inestables:

  • Suelos con alta concentración de arcilla expansiva o materiales orgánicos no son recomendables sin una intervención significativa, ya que pueden sufrir grandes variaciones de volumen, afectando la estructura.

7. Condiciones sísmicas:

  • En zonas sísmicas, el suelo debe ser capaz de resistir las fuerzas sísmicas sin deformarse significativamente. Se deben considerar técnicas de ingeniería sísmica en la cimentación si es necesario.

8. Accesibilidad y logística:

  • Aunque no es una característica puramente geotécnica, es importante que el terreno permita fácil acceso para la maquinaria de construcción, y que la ubicación sea logística para el uso de la nave industrial.

Estudio geotécnico:

Antes de empezar cualquier proyecto de construcción, se debe realizar un estudio geotécnico que determine todas estas características y permita el diseño adecuado de la cimentación y estructura de la nave.

Estas consideraciones garantizan que la nave industrial sea segura y eficiente a largo plazo, evitando problemas estructurales y sobrecostos debido a malas condiciones del suelo.